Flora Tristán, pionera del feminismo
Desde hace siglos, han sido numerosas las mujeres que han luchado, para que se hagan valer sus derechos y se las trate con igualdad ante el hombre. Una de las pioneras por esta lucha es nuestra protagonista, Flora Tristán. Flora Celestine Therese Henrriete Tristán Mocoso, más conocida como Flora Tristán nació el 7 de Abril de 1803 en París, en el seno de una familia acomodada. Su padre fue el coronel de la armada española, de origen peruano, Mariano Tristán Mocoso y su madre fue Therese Laine, una joven de origen francés, afincada en España durante La Revolución Francesa.
Sus primeros años de vida transcurrieron de forma pacifica, debido a la buena posición económica que gozaban sus padres, amigos íntimos de Simón Bolívar. Pero a la edad de cuatro años su padre muere y la familia se ve sumida en la mayor de las pobrezas. Pero esto no es impedimento para que su madre hiciese todo lo posible para que ella y sus hermanos, gozarán de una buena educación.
Con 17 años, convertida en una hermosa adolescente y viendo que la familia no salía de la pobreza, se ve obligada a trabajar como obrera en un taller de litografía. El dueño del este lugar, André Chazal, al conocerla se enamora de ella y acaban casándose un año después. De esta unión nacen tres hijos, siendo una de ellos, la madre del famoso pintor Goin.
Después de 5 años de matrimonio, Flora decide finalizar su matrimonio, debido a los continuos maltratos que le propinaba su esposo. Pero no fue una separación fácil, ya que la custodia por los hijos duró la friolera de 12 años.
Es en esta época, después de haber pasado tantas barbaries, cuando nace en Flora, una actitud revolucionaria, convirtiéndola en una de las precursoras del movimiento feminista, luchando durante años por los derechos de la mujer.
Lo primero que hace es, ponerse en contacto con las organizaciones obreras inglesas y concienciarlas de las explotaciones que sufren. En 1833 viaja a Perú, e intenta que las mujeres de Lima y Arequipa se liberen y luchen por sus derechos, causando un gran revuelo en todo el país. De vuelta a Europa, se dedica a leer ideologías marxistas, que le ayudan a respaldar sus reivindicaciones sobre las injusticias que sufren las mujeres. En 1835 publica su primer texto llamado, «La situación de las mujeres extranjeras pobres en Francia«, a este le sigue una series de títulos como, «Peregrinaciones de una paria«, «Paseo por Londres«, «La Unión Obrera» y «La Emancipación de la Mujer«.
Aunque tuvo una vida corta, murió el 1844 en París debido a una tifoidea, su lucha y su entrega a las ideas que tenía sigue presente en la sociedad. La mujer a tomado protagonismo y se ha hecho respetar ante un mundo dominado por los hombres.